Premios Baco

Recientemente he tenido la oportunidad de asistir como jurado en los Premios Baco, una cata-concurso de los vinos jóvenes del panorama nacional organizado por la UEC que pone a prueba su calidad, distinguiendo a los mejores con las famosas medallas, los Baco de Oro, Plata y Bronce.



Os dejo un enlace por si tenéis más interés en conocer tan singular concurso, que ya está en su XXVI edición amparado por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente:
http://www.uec.es/bacos


Y esta introducción me viene fantástica, para hablar de concursos, premios y demás.


Aunque aún me falta recorrido en el mundo gastronómico, concretamente toda una vida, cuando he tenido la oportunidad de asistir como jurado en algún certamen, siempre ha imperado por encima de todo la credibilidad y la honestidad.


En este caso, éramos 60 profesionales del sector, divididos en mesas de 5, donde analizamos 40 vinos y como única información, teníamos la categoría a la que pertenecía el vino, por ejemplo, vinos blancos de variedades no aromáticas, o vinos rosados, etc.


Ahora viene el dilema, cuando llegamos a una estantería de vino, y encontramos un botella exhibiendo algún galardón o medalla… ¿esto es un parámetro que nos asegura calidad en su categoría?.


A priori sí, aunque no podemos obviar otros muchos factores, esto no es refresco americano, los vinos evolucionan, maduran, envejecen, están a expensas de una buena/mala conservación por parte de la tienda que los vende, de un transporte correcto desde la bodega, etc., en definitiva, nada tiene que ver un vino catado de una manera aséptica, a lo que lo nos podemos encontrar en el mercado.


Además, os recomiendo si vais alguna vez a una bodega, pidáis catar dos barricas con el mismo vino y el mismo periodo de crianza y por supuesto el mismo tipo de barrica, ¿serán iguales?. Si hiláis fino, veréis dos productos que se parecen, pero con matices diferentes… insisto, el vino no es un refresco!. Si eso lo extrapoláis al coupage que se hace, se embotella y se envía a diferentes lugares del mundo… al cabo de unos meses, se deberían parecer…pero con matices diferentes…


Un galardón o medalla, nos asegura un reconocimiento de calidad, que en una mesa, con diferentes catadores, puntuando de manera independiente y sumando colectivamente, sale más o menos victorioso.