BBC, ¿British Broadcasting Corporation? ¡No! ¡Bodas, Bautizos y Comuniones!
Seguimos
con la programación de la BBC.
Vamos a
por el menú!!! Otro de los grandes
enigmas cuando decidimos hacer un acto social en torno a una mesa y donde los problemas
crecen proporcionalmente a las personas que intervienen en la decisión.
Después de tener diferentes dossieres con numerosas opciones de
menú, toca decidirnos con qué restaurador “nos casamos” y aunque la finca o el espacio donde se celebre el evento
suele ser decisorio para nuestra elección, sí que nos preocupa siempre
la calidad del restaurador. Ante la falta de referencias,
solemos ir un poco a “ciegas”, pero queremos valorarlo de la manera mas objetiva posible.
Por ese
motivo, el restaurador suele ofrecer una prueba de menú, donde nos da normalmente la opción de escoger tres de ellos e invitarnos junto a nuestros
respectivos progenitores a discernir sobre ello... primer problema serio...
Si ya es
difícil ponerte de acuerdo con tu “parienta”, imagínate con los respectivos padres opinando y claro, bonachón de ti, que quieres contentar
a todo el mundo… misión imposible!.
Lo mejor
es que busquéis menús con sabores populares, con un alto grado de aceptación, porque no se trata
de lo que os gusta, sino de lo que le gusta a la mayoría
de tus invitados, ¿lógico no?. En absoluto, pero os
aseguro que mayoritariamente, en estas pruebas de menú, se escucha más el “a mi me gusta” y menos “a la mayoría le gusta”.
Para ello
es muy importante conocer qué tipo de invitados vais a tener, que aunque puede parece
obvio, no lo es.
¿Os imagináis que tenéis un grupo numeroso de
vegetarianos entre vuestros invitados y vosotros proponéis un festival gastronómico entorno al cerdo?
Consejillo, averiguad si tenéis algún menú especial, vegetariano,
fobias, alergias, etc. y proponed un menú alternativo para ese invitado
y sobre todo, que lo sirvan de manera discreta, de verdad, me parece horrible
cuando llega el camarero a la mesa y empieza a gritar: ¿El que no come
zanahorias quién es? Y tu piensas... tu madre!!!.
Una vez
valorado más o menos que tipo de
invitados tenéis, hay que discernir también en que época del año es el acontecimiento y si es comida o cena, aunque
normalmente es el propio restaurador el que ya te lo indicará con los menús, no nos pondrá un gazpacho en el mes de Enero, pero estaría bien que os adelantárais a esto, y que jugárais con la
estacionalidad a la hora de confeccionar el menú, seguro que favorecerá la calidad de la materia
prima utilizada en el menú.
Y
proponer ideas coherentes, si es en el mes Enero, no estaría mal recibir a los invitados con un vaso de “caldito” caliente, ¿qué tontería no?
Sigo en
breve con la parte III!!!.
1 comentario:
Qué razón tienes!!!! No se puede poner lo que a uno le gusta, porque tienes que pensar que 200 personas no tienen el mismo gusto que tú. Hay que intentar elegir algo sencillo y que le pueda gustar a todo el mundo. Gracias por el consejo!
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